
La plantilla del iShoe está equipada con una gama de sensores que permite la medición y análisis de la distribución de presión de los pies del paciente así como su envío a un ordenador.
Hay muchos aparatos que pueden detectar cuando una persona está cayendo, pero los iShoe permiten hacerlo antes de que la misma persona sepa que va a caer.
El proyecto forma parte de un programa de la NASA que pretendía solucionar los problemas de equilibrio que experimentan los astronautas al volver de sus misiones espaciales.
El invento podría ayudar a los médicos a realizar diagnósticos sobre el balance de las personas como la pérdida de equilibrio, la osteoporosis y otros factores que pueden reducir la movilidad y provocar accidentes.
Fuente de información: MIT News
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